Fuente: Organización Editorial Mexicana
XALAPA, Ver. (OEM-Informex).- El combate contra la piratería se está perdiendo porque existe falta de concientización social en el respeto a la propiedad intelectual, aseveró César Javier Urzúa Miranda, fiscal regional del Centro Norte de Santiago de Chile, al participar en el seminario de Derecho Internacional.
Indicó que ninguno de los países de Latinoamérica se salva de la piratería y la copia de obras intelectuales, pues las personas usan como aliado al internet para obtener lo que desean sin pagarlo.
Entrevistado en el Quinto Seminario Permanente de Derecho Internacional del Anuario Mexicano de Derecho Internacional «Praxis del Derecho Internacional», realizado en la Facultad de Derecho de la Universidad Veracruzana (UV), expuso que tanto en México como en Paraguay, Chile y Colombia, entre otros países, la piratería tiene amplia presencia.
«En ninguno de los países de América Latina existe completo respeto a la originalidad de los productos porque no hay conciencia en la gente sobre lo que significa e implica la propiedad intelectual, se bajan las cosas por internet sin pensar el daño para los autores», dijo.
Aseveró que la música, ropa y libros son los rubros en donde se tiene mayor piratería o bien en los cuales es más notoria la venta de productos que carecen de originalidad.
Manifestó que ningún autor, del tipo que sea, quiere que terceros usen sin su autorización la obra que le costó construir para obtener recursos económicos.
En el caso del fotocopiado de libros, comentó que es difícil percatarse de la presencia de la piratería, aunque su réplica si está permitida en las bibliotecas.
«El fotocopiar un libro es vulnerar los derechos de autor, no penalmente, pero sí civilmente porque no hay una concientización del hecho, pero está claro que si se hace con el fin de venderlo, definitivamente es un delito», expresó.
Respecto a la utilización del internet para obtener libros, música o películas, comentó que a la fecha no existe una ley que regule este tipo de piratería, por lo cual, es complicado ajusticiarla.
Manifestó que cuando un autor se da cuenta que están pirateando su obra, se debe dar aviso a las autoridades, quienes deberán comprobar el hecho y resolver conforme a derecho.
«La confiscación y destrucción de los productos ilegales que se identifiquen es la obligación de las autoridades, pero también el juez determinará el tipo de indemnización o resarcimiento de daño para el autor al que le fueron replicadas las obras o productos registrados a su nombre», agregó.