Nuestro mayor legado no serán nuestros logros. Serán nuestros hijos.
Muchas veces nos vemos repitiendo con nuestros hijos los errores de nuestros padres, porque no hemos tenido otro ejemplo. Los hijos aprenden por el ejemplo, y nadie tiene mayor influencia sobre los hijos que sus padres.
La mayoría de padres estamos dispuestos a morir por nuestros hijos. ¿Pero estamos dispuestos a vivir por ellos? Vivir por nuestros hijos significa medir cada paso, y cada palabra que hablamos. Es invertir tiempo de calidad y tiempo en cantidad para establecer una relación de confianza, instruyéndolos con amor, aceptación, afirmación y admiración.
Nuestros éxitos y fracasos con frecuencia se reducen a las voces que escuchamos, y a las personas en quienes confiamos. Este libro es esa voz que nos llevará a entender que el verdadero éxito en la vida no es que nuestros hijos sean todo lo que queremos que sean, sino que lleguen a ser todo aquello para lo cual Dios los creó.
Con la narrativa sabia y poética que caracteriza a Sixto Porras, nos cuenta su historia de éxito, y paso a paso, traza el camino hacia las lecciones de vida que debemos enseñar a nuestros hijos.