A medida que los niños crecen y experimentan la vida, se enfrentan a «gigantes» en muchas formas: las heridas, las luchas, los miedos y las tentaciones del mundo que seducen a innumerables jóvenes lejos de su llamado divino de representar a Jesús en pureza y poder. Es vital para los padres entrenar a sus hijos para derrotar a estos gigantes, para convertirse en vencedores de gigantes.
En estas páginas descubrirás cómo apoyar su singularidad, dones y fortalezas mientras te animas a enfrentarte y destruir a tus propios gigantes, sabiendo que tu ejemplo se convertirá en la herencia de tus hijos.