
Es asombroso cuán pesado se puede sentir el peso del vacío en nuestra vida, cuánto espacio puede ocupar en nuestra alma. Únase a Nancy Guthrie en descubrir por qué el vacío nunca ha sido, y nunca será, un problema para Dios. Experimente página tras página la gracia y la esperanza de que su vacío puede ser, y será, llenado con la presencia misma de Dios, ya que cuando Dios mira en los lugares vacíos de nuestra vida, él ve su mayor oportunidad.